Por ella se sabe que la vida es un todo armónico y completo, no interrumpiéndose nunca, más bien formando un conjunto de valores que propici

"an la felicidad, en razón de Ias adquisíciones que se consiguen en Ias múltiples etapas de Ias existências corporales.

Facultad que se puede perfeccionar a través dei ejercicio y de una sana moral, se abre ofreciendo tesoros que, utilizados indebidamente, se transforman en cargas y penas dolorosas.

Pone el hombre físico en contacto directo con el hombre espiritual desvestido de Ia matéria, anticipándole la vision de Io que le espera, concluido el ciclo carnal por donde transita.

Si Ia muerte constituye una desgracia, un sinsabor, separando aquellos que se aman, Ia inmortalidad, Ia esperanza dei reencuentro son Io más bello y grandioso que se puede anhelar, mientras se siente Ia pérdida de alguien que parte dei mundo, dejando anoranzas y vacío en el corazón. La mediumnidad es el instrumento que favorece ese intercâmbio, devolviendo a quien partió sin alejarse, y sustentando a quien quedó sin desesperarse.

Hay personas desinformadas de los benefícios que Ia mediumnidad propicia, que afirman tener miedo de desarrollar sus potencialidades, relegándolas al abandono y a Ia perturbación, claro que sin quitarle los recursos que posée.

Ignorar una facultad de relieve, no significa superar!

^ o librarse de ella: sino encaminarse hacia un problema que se configurará grave, en razón dei desprecio, con el pasar dei tiempo.

Naturalmente, una paranormalidad, como sucede con los recursos sensoriales y psíquicos comunes, exige cuidados y atenciones. Pero toda Ia vida orgânica es, a Ia vez, un compromiso que inpone atenciones, educación, constante preocupación para cosechar salud, equilíbrio, cultura.

Desconsiderar un hecbo, no representa vencerlo, sino sufrirlo a disgusto.

Se acusa a Ia mediumnidad de provocar trastornos psíquicos y emocionales; de puerta abierta a lã íntervención satânica. Sin embargo, son indebidas esas calúmnias, ya que, al contrario, los fenômenos mediúmnicos atestiguan que aquellos que son portadores de facultades presentan mejor salud y un comportamiento más equilibrado; facilmente comprensible, por permanecer y sentir vibraciones más sutiles, por tanto, vivir en una faja mental superior.

La percepción que tienen los médiums, cuando son educa das sus facultades, les permite una sintonia con el mundo de Ias causas, con seres nobles, que se les constituyen en guias y maestros, amigos y bienhechores.

Los distúrbios que se apuntam como causados por Ia mediumnidad, no son diferentes a los de otras personas sin percepción paranormal. El problema no es de Ia facultad, sino de Ia criatura que, en si misma, es distónica, nerviosa, psicópata, si es el caso...

Los demonios, todos 1o sabemos, son Ias almas de los hombres malos que desencarnaron y continúan con sus inclinaciones inferiores, complaciéndose en perjudicar, afligir, transmitir penas, manteniendo Ia ignorância.

El desarrollo de la mediumnidad es el más eficaz antídoto a ese mal, por esclarecer a dichos Espíritus e impulsados a un cambio de actitud, orientândolos para el bien, para progresar.

Bajo cualquier punto de vista saludable, la mediumnidad es un recurso superior para la vida, ofreciendo alegria de vivir, consuelo y paz.

Perla rara, es deseada por los ladrones espirituales, que la quieren poseer; te/éfono precioso, sufre el interés de los ligeros, que les gustaría utilizado para su propio placer; puente valioso, padece luchas de quienes quieren control absoluto para dominado.

Cuidaria, atendería, desarrollarla con carifío, es deber que nadie puede ignorar o transferir bajo justificaciones improcedentes.

Y puesta al servicio del bien constituye magnífica donación de Dios para la dignificación y elevación del hombre, en su relevante proceso de iluminación interior y paz intégral.

DANIEL SUAREZ ARTAZU

Zaragoza, Espana, 26/08/80